jueves, 28 de julio de 2011


Rocío, hubo un incendio y me quedé sola todo el fin de semana.
Yo vivo sola y el mundo se me incendia a cada rato.

(Se miran como si ser feliz fuera una ofensa.
-Vivir como si viniéramos
de un mundo mejor-).

sábado, 23 de julio de 2011

Nadar sola


Yo empecé a ser así desde que te conocí. Antes no tenía el pelo rojo, pero ya lo pensaba y capaz que lo pensaba desde que te conocí.
Antes de eso caminaba descalza. Antes de eso nadaba. Ahora también. Cuando voy a la pile y no hay nadie porque es muy temprano y el sol da de una manera que ilumina sólo una parte,  ahí no puedo dejar de nadar pecho. Porque cuando nadás pecho mirás de frente y después te zambullís y el agua a los costados no parece una pileta. Hay una redondez de mundo. Yo empecé a mirar de frente desde que te conocí.

viernes, 15 de julio de 2011

Cómo


¿Cómo querés que duerma
si afuera hay un cielo hecho de espasmos?
si mi piel corre también bajo esta ruta, bajo nuestro peso;
si la infancia que no tuve
nos está esperando en una tumba
que no vi.
Cómo querés que duerma
si no quiero despertarme,
no quiero que mañana
se parezca a nada.
Y no se va a parecer.
Pero me quedé del otro lado
y ahora no hay despertador,
ni galletitas en el desayuno.
Ya no más los paseos
de cuando nos queríamos como jóvenes
y a vos te decían que me cuidaras
y nunca me cuidabas,
porque para vos
mudarme a otro alrededor
estaba bien.
Y no entendías
que yo tenía tres años
pero que ya sabía
lo que era extrañar a alguien,
porque lo aprendí de golpe
en el primer viaje.
Cómo querés que duerma
si ni siquiera puedo en mi cama
si ni siquiera podía
cuando la visita que no fuiste
era algo que también iba a pasar.
Decime un poco
cómo querés que haga
si mañana vas a ser
completamente un cuerpo
y te van a crecer flores
que yo nunca voy a poder
mirar a los ojos.
Y ahora cuando me pregunten de vos
ya no voy a poder decir
vive lejos
porque ahora sí que es cierto.
Y aunque tu hijo me quiera señalar  un lugar
no sabemos dónde está.
Después de esto ya nadie me va a creer
cuando no hable de vos
si ni yo
me creo que no existís.

Plantita


En la ventana de mi casa hay un helecho. Siento de noche que tiene en las hojas la mirada sorprendida de los que pasaron. No hay descanso parecido si me quedo parada viéndome brotar. Noches en las que no hay mayor alegría que la de haber sido ventana.

viernes, 1 de julio de 2011

Lo río


Todo lo río de lo río,
de lo lomo marrón remontado,
de tu estrella brillosa que
se mese al ritmo del nado.
Todos los ríos en sus aguas
que no son las mismas,
que nunca vuelven
al mismo cántaro.
Toda la intimidad cenagosa
del camalote hecho lecho,
hecho horizonte, hecho espejo
hecho ojos contados.
Todos los ríos de agua,
todos los ríos de barro de secreto.
Con su transparencia simulada,
con su carencia de cielo.
Todos. Tus barros y mis
barros. Tus costas sin tregua
de tanto latigazo.
Todo lo del lado de afuera.
Lo que flota en el aire,
lo hondo que se dice hondo,
lo pájaro, lo quietud inclinada,
lo lejos que estamos
del cielo.

Los peces


No me mirés así como miran los peces
como si ya se hubieran tragado
todo el mar.
Como si tuvieran párpados.
No me mirés así,
como si todavía pudieras cantar.